Debido a la suba de gastos primarios para paliar los efectos de la crisis generada por la pandemia y la baja real de los recursos tributarios, el resultado primario (neto de utilidades del BCRA) paso de un superávit de $10.054 millones en abril de 2019 a un déficit de $263.753 millones en igual mes de 2020.
Esta situación se atenúa drásticamente a partir de la transferencia de utilidades del BCRA por $230.000 millones, que lograron compensar la caída de la recaudación tributaria y de los recursos de la Seguridad Social producidas por la paralización económica del Aislamiento Social Preventivo Obligatorio (ASPO). Contemplando el ingreso de las utilidades, el déficit primario se reduce a $33.753 millones.
El hecho distintivo de la ejecución de abril estuvo dado por el significativo incremento de los gastos primarios, de 54,1% año contra año (a/a) en términos reales, a partir de las medidas adoptadas por el gobierno nacional en el marco de la emergencia sanitaria, entre las cuales se destaca el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE). No obstante, debido a que los intereses de la deuda retrocedieron 63,1% a/a, el aumento de los gastos totales experimentó una suba más moderada, de 26,9% a/a.
Dentro de los ingresos tributarios ($171.427 millones), el IVA y el impuesto a las Ganancias tuvieron caídas reales del 16,1% a/a y 32,9% a/a, respectivamente, no sólo por la retracción económica que produjo la cuarentena sino por cuestiones normativas, como la devolución del IVA para la compra de alimentos y la reducción de aportes patronales.
Durante los primeros cuatro meses del año el crédito inicial aumentó en $203.115 millones, concentrándose el 91,0% del aumento en las prestaciones sociales ($87.820 millones), en las transferencias a provincias ($73.653 millones) y en otros gastos corrientes ($32.520 millones).
ANÁLISIS DE LA EJECUCIÓN PRESUPUESTARIA DE LA ADMINISTRACIÓN NACIONAL - ABRIL 2020